El piloto británico Lewis Hamilton
(McLaren-Mercedes) ganó el Gran Premio
de Australia, primera de las 18
pruebas del Campeonato del mundo
2008, esta madrugada en Melbourne.
El alemán Nick Heidfeld (BMW-Sauber)
fue segundo, a 5,4 segundos del líder,
seguido de su compatriota Nico
Rosberg (Williams) y del español
Fernando Alonso (Renault),
bicampeón mundial, que
había salido en undécima posición.
Este fue un Gran Premio de Australia
lleno de incidentes en el que el
safety car ha tenido que entrar a
pista en tres ocasiones y sólo siete
pilotos han cruzado la línea de meta.
Los alemanes Nick Heidfeld y
Nico Rosberg han acompañado al
nuevo líder del Mundial en el podio.
La nueva temporada de la Fórmula Uno
ha dado comienzo con una carrera llena
de incidentes desde la primera vuelta.
Mientras Lewis Hamilton lograba mantenerse
al frente de la prueba tras haber
arrancado desde la pole position,
cinco pilotos se despedían del público
australiano en varios incidentes.
Vettel y Fisichella se veían envueltos en
un accidente nada más tomar la salida,
mientras que Button y Webber protagonizaban
otro y Anthony Davidson abandonaba la prueba
poco después tras dañar la suspensión de su
Super Aguri. El brasileño Felipe Massa tampoco
tenía mucha suerte y tras perder el control de
su Ferrari colisionaba ligeramente contra la
barrera de protección del circuito, lo que le
obligó a entrar en boxes.
El coche de seguridad entraba en pista por
primera vez y al final de la segunda vuelta,
con Hamilton liderando a Kubica, Kovalainen,
Rosberg, Heidfeld, Trulli, Barrichello,
Raikkonen, Coulthard y Alonso, abandonaba
el trazado dejando que el gran premio
continuase con su ritmo.
En la décima vuelta la carrera perdía a otro
de sus pilotos: el alemán Adrian Sutil, que
había tomado la salida desde el pitlane tras
haber cambiado de monoplaza, entraba en boxes
para retirarse.
Con los pilotos haciendo las primeras paradas
en boxes de la tarde, siendo Kubica el primero
en la vuelta 17, llegaría otro abandono: el
italiano Jarno Trulli en la vuelta 21.
El caos continuó en Albert Park en la vuelta 26
cuando Massa tocó la parte trasera del Red Bull
de Coulthard provocando que éste acabase chocando
contra la barrera de protección.
Durante cuatro vueltas el auto de seguridad
volvió a rodar en el circuito australiano, y
cuando abandonó la pista, en la vuelta 30, la mala
suerte continuó con los pilotos de Ferrari.
Kimi Raikkonen, por un lado, perdía el control
de su monoplaza en la tercera curva al intentar
pasar a Kovalainen y quedaba relegado a las
últimas posiciones de carrera, mientras que,
por otro lado, el Ferrari de su compañero
Massa abandonaba en pista.
Takuma Sato y Nelson Piquet serían los dos
siguientes pilotos en abandonar el caluroso
Gran Premio de Australia, reduciendo a 12
el número de participantes. La situación parecía
calmarse en pista mientras Kimi Raikkonen
intentaba recuperar posiciones y tiempo perdido,
y Alonso quedaba estancado detrás del BMW Sauber
de Robert Kubica en octava posición.
La tercera y última aparición del safety car
llegaba en la vuelta 44 después de que Timo
Glock tomara mal la curva 12 y acabara
colisionando contra la barrera de protección
cerca de la curva 13.
La carrera volvió a su ritmo normal en el
giro 47 y Nakajima y Kubica entraban en
boxes después de que el japonés tocara
el monoplaza del polaco. El piloto de
Williams regresó a pista con un nuevo
alerón frontal, mientras que Kubica se
veía forzado a abandonar la prueba.
Kimi Raikkonen se retiraba a pocas vueltas
para la línea de meta y el debutante
Sebastien Bourdais decía adiós a su primer
gran premio de Fórmula Uno a tres vueltas
del final, cuando se encontraba en cuarto
lugar. La competencia vio un momento de
acción en las últimas curvas de la penúltima
vuelta cuando Kovalainen pasaba a Alonso
y el español le devolvía el gesto pocos
metros después.
Tras completar las 58 vueltas del Gran Premio
de Australia sin problemas, Lewis Hamilton
cruzaba la línea de meta en primer lugar
seguido de Nick Heidfeld y Nico Roberg.
Fernando Alonso acabó en cuarto lugar con
Heikki Kovalainen un puesto más atrás y
Barrichello en sexta posición. Nakajima
concluyó en séptimo lugar y Bourdais, a
pesar de no haber finalizado la prueba,
se llevó el último punto.
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